Vivir viajando
Vivir viajando es uno de los sueños más comunes. Nosotros lo hemos conseguido, y en este artículo explicaremos cómo.
Cuando alguien se pregunta si es posible
vivir viajando, a lo que en realidad suele referirse es a la posibilidad de poder
viajar por el mundo y ganarse la vida al mismo tiempo.
Hablaremos desde nuestro punto de vista y desde nuestra propia experiencia, que empezó cuando en el 2004 decidimos dejar nuestros trabajos y lanzarnos a la aventura de irnos a
dar la vuelta al mundo.
UN GRAN CAMBIO DE VIDA
Para entender cómo llegó un momento en que vimos que teníamos que
cambiar de vida sino queríamos ser infelices el resto de ella, puedes leer el post
Viajar para perder el miedo a la vida.
En él explicamos cómo eran nuestras vidas antes de nuestra
primera vuelta al mundo. Lo que a mucha gente le llama la atención, es la manera cómo relatamos la situación en la que vivíamos por aquel entonces a nivel económico y lo absurda que era una vida como aquella. Cuando decidimos que íbamos a romper con aquella rutina, realmente pensábamos que dejarlo todo y viajar era una acción que iba a representar un paréntesis en nuestra vida y que después todo volvería a la rutina de siempre.
Pero nos equivocamos.
En El Parque Nacional Torres del Paine, Chile, en nuestra primera vuelta al mundo en 2005.
Al volver, vimos que nuestra vida había cambiado y que ya no había marchar atrás. Decidimos en aquel momento enfocar todas nuestras fuerzas en hallar una manera que nos permitiera
viajar por el mundo y vivir de este modo.
NÓMADAS DIGITALES
Nuestra manera de conseguir poder estar viajando en cualquier parte del mundo y pararelelamente ganarnos la vida, fue convertirnos a un nuevo concepto, el de
nómada digital. Consiste en vivir sin tener un lugar fijo de residencia o viajando gracias a ganarte la vida teniendo suficiente con tu ordenador y una conexión a internet. Evidentemente hay muchas maneras de
ganar dinero viajando, pero vamos a explicar cómo lo hacemos nosotros.
También dentro de lo que es el nomadismo digital, hay infinidad de opciones pero nos centraremos en la nuestra a modo de ejemplo. En nuestro caso, y aprovechando que teníamos nociones de diseño gràfico, decidimos formarnos en diseño y programación web.
A partir de ahí, creamos un pequeño negocio y conseguimos los primeros clientes. La estrategia era
vender páginas web y ofrecer un mantenimiento posterior. Evidentemente, una vez creada la web, el mantenimiento tenía que ser posible realizarlo a distancia.
Conseguimos rápidamente varios clientes, puesto que téníamos precios muy competitivos ya que lo que de verdad nos interesaba a nosotros no era el dinero que podíamos ganar creando la web, sino la posibilidad de realizar un mantenimiento posterior que nos iba a posibilitar este modelo de negocio deslocalizado.
Cuando ya contábamos con una buena cartera de clientes, iniciamos nuestra
segunda vuelta al mundo. Teníamos las lógicas dudas acerca de si el negocio que habíamos creado iba a ser realmente viable. Una cosa era la teoría y otra la práctica.
Pero funcionó. De hecho, cuando acabamos nuestra segunda vuelta al mundo después de ocho meses, comprobamos que la mayoría de clientes ni se habían dado cuenta de que todo aquel tiempo habíamos estado en la otra punta del mundo.
El mundo es nuestra oficina
ENCONTRAR LA VOCACIÓN
Nuestro negocio de páginas web fue la base sobre la cual se sustentó nuestra manera de vivir. Hay que remarcar que con el problema de la crisis económica no fue fácil, pero al fin y al cabo nos permitió
viajar por todo el mundo y esa era la idea.
Pero tenemos que confesar una cosa: Programar y diseñar webs no era nuestra vocación. Era un trabajo que simplemente nos gustaba, creíamos que era divertido y pensábamos que era un buen modo de ganarse la vida. Pero no era nuestra pasión.
Una vez hicimos viable
vivir viajando, nos atrevimos a dar el siguiente paso, que era vivir de lo que realmente era nuestra pasión, nuestra vocación: escribir.
Así pues, en el año 2007 publicamos nuestro primer
libro de viajes, basado en nuestra primera vuelta al mundo,
Diario de viaje de un viaje diario. En él pretendíamos no sólo relatar nuestro viaje, sino también explicar cuales habían sido las motivaciones para emprender esta aventura y hacer hincapié en lo que significa cambiar de vida y, también, lo difícil que es en nuestra sociedad ir a contracorriente.
Más tarde, en el 2009, escribimos
Pasaporte hacia ningún lugar, donde narramos las aventuras de nuestra segunda vuelta al mundo. Es el libro donde relatamos ya nuestros viajes desde un punto de vista más conscientes de que aquello era nuestra manera de vivir y no un viaje puntual, como había sucedido durante la primera vuelta al mundo.
Y en 2012 publicamos
Todo al 69, la obra de la que nos sentimos más orgullosos. Hemos recibido muchos elogios por este libro, pero lo que más nos ha gustado es que muchos de los elogios han venido de otros viajeros, algunos ilustres, diciéndonos que habíamos sabido plasmar muy bien el concepto de viajar y la filosofía que va unida a ella.
Es un libro que habla de todo lo que hemos
aprendido viajando en los últimos años, y de cómo eso ha influido en nuestra personalidad. Lo hacemos a partir de una serie de valores y conocimientos que hemos ido adquiriendo por el camino (solidaridad, respeto, ecologismo, igualdad, etc), y lo vinculamos a los países que hemos visitado.
En el libro se habla también de las
crisis personales y cómo superarlas, pues nuestra tercera vuelta al mundo estuvo llena de malos momentos que nos hicieron reflexionar mucho y superarnos como personas.
Actualmente, podemos seguir viajando gracias a la combinación de los ingresos procedentes de nuestras pasiones: viajar y escribir. Seguimos escribiendo nuestros libros (ya nos hemos lanzado con la novela!) y organizamos nuestros propios viajes,
viajes de autor, que reflejan al 100% nuestra filosofía de viaje y nuestra experiencia como viajeros.
Nuestra web se ha convertido en nuestra fuente de ingresos y ahora somos nosotros los que damos consejos y formación a otros viajeros para que consigan
montar su negocio online y puedan vivir viajando.
Vendiendo nuestros libros en las Ramblas de Barcelona.
¡Vivir viajando es posible!. Hay mucha gente que lo está haciendo actualmente. ¿Por qué no ibas a poderlo hacer tú? El mundo está lleno de oportunidades, tan sólo hay que reconocer la que nos interesa a nosotros y
luchar por ella.
Esperamos que este artículo te haya gustado y que te haya servido de inspiración para empezar a imaginar cómo puede ser tu nueva vida.