AREQUIPA, UN LUGAR DE REENCUENTRO CON EL PERÚ
Publicado el Miércoles 03-10-2012 - (1 comentarios)Llegar a Arequipa trajo consigo dos grandes alegrías; primero de todo, la gratísima sensación de volver a estar en tierras peruanas. Y después, el alivio de ver que nuestro viaje empezaba a descender. Después de pasar por el altiplano Boliviano sufriendo alturas de hasta 4.500 metros, era un descanso estar a apenas 2.300 metros. Nuestra salud lo iba a agradecer bárbaramente.

Es muy difícil explicar las sensaciones que se tienen al volver a un lugar en el que hace muchos años fuiste feliz. Todo encaja, y de repente hacen acto de presencia miles de recuerdos que estaban muy dentro de ti pero que no eras consciente de que existían. Contemplas cosas que pensabas que habías olvidado, sintiendo un extraño episodio al percatarte de que lo que en realidad sientes es que las echabas de menos. Los taxis pequeños y cuadrados, los locales de comida diaria, las mujeres con perfectísimas trenzas, el olor a maíz...

Cuando uno está de buen humor y anímicamente satisfecho, suele suceder que el lugar que visita gana muchos enteros para que sea un lugar que le agrade.
Volver al Perú nos trajo un halo de felicidad, así que automáticamente Arequipa resultó un lugar que nos fascinó.
Sucede también que nos apasionan los centros históricos coloniales, y Arequipa cuenta con uno impresionante. De hecho, es patrimonio de la humanidad según la UNESCO.
La arquitectura es fabulosa, y la ciudad ofrece una imagen radiante.

Algo que nos sorprendió, fue que vimos infinidad de negocios con anuncios de ofertas de trabajo. En un momento en el que en nuestro país es muy difícil encontrar empleo, quizás Perú sea un buen lugar para trabajar. De hecho, desde Julio de 2012 se considera a Perú una economía emergente. Nosotros nos alegramos por ello, por los lazos de amistad que tenemos con el país y su gente.

Algo que nos fascinó de Arequipa, fue la visita al museo donde se encuentra la momia Juanita. Fue en 1995 cuando el arqueólogo Johan Reinhard y el andinista Miguel Zárate divisaron durante una expedición el cadáver de una joven que estaba increíblemente bien conservado. Después de las investigaciones y de la autopsia, se llegó a la conclusión que Juanita, en el momento de su muerte, debía tener unos 14 años y fue sacrificada como ofrenda humana en una ceremonia Inca, hacia el año 1450.
El museo es uno de los que más nos ha gustado de todo América. Muy bien explicado y muy pedagógico. Poder contemplar la momia Juanita, fue una experiencia sobrecogedora.

Cultura, buena comida, gente amable, una plaza de Armas con mucha vida, una ciudad con una arquitectura preciosa, los Incas, los Andes... ahora recordábamos porque Perú nos había fascinado siete años atrás.



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