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MANALI PARA UN AGUERRIDO VIAJEROPublicado el Sábado 30-07-2011 - (2 comentarios)
Unas mujeres hacen la colada en un río.A veces es difícil decidir el siguiente punto de la ruta, intentando encontrar aquellos lugares con encanto sin caer en los mismos sitios que todos los viajeros. Aunque, pensándolo bien, ¿no es un poco surrealista el hecho de querer encontrar un lugar extraordinario y a la vez quererlo vacío de gente?
Hay quienes se sienten tan superiores que se creen con el derecho juzgar tu elección, decirte lo que está bien y lo que no, a etiquetarte con sus propios prejuicios. Quizás no se dan cuenta que viajar es una experiencia única, que a veces la diferencia la marca simplemente conocer a una persona determinada, hospedarse en un sitio encantador, la primera impresión del lugar, o incluso tu propio estado de ánimo.
Por eso nos gusta experimentar por nosotros mismos y dar un valor relativo a la experiencia de otros viajeros, a los blogs como este que estás leyendo o a las guías de viaje.
Eso hicimos con Manali, desoyendo una “no” recomendación de un aguerrido viajero que nos lo pintó como un lugar de perdición apto sólo para fumar petardos.
Quizás fue por el hecho de alojarnos en la tranquila y pintoresca aldea vecina, Vashist, por el hecho de perdernos por los senderos de los alrededores, por disfrutar de un alojamiento con unas vistas impresionantes, o quizás fue por que nos dio la oportunidad de conocer a Martina y Sergio, dos viajeros que se encuentran en la mitad de su gran aventura de vuelta al mundo… Cualquiera de estos aspectos hubiera hecho que, por si mismo, valiera la pena nuestra estancia en Manali.
Aunque se tiene que reconocer que en una cosa tenía razón nuestro querido aguerrido viajero: Literalmente, ¡había “María” hasta en los márgenes de los caminos!
Puente cerca de Manali.
Disfrutando de la paz y las vistas de Manali.
Casa típica del pueblecito de Vashist.
Ropa a secar sobre las piedras del camino.
Casa de madera en Vashist.
Una vivienda en Old Manali.
La zona de Old Manali es mucho más turística pero también tiene partes con encanto.
Con Martina y Sergio, en un templo de Manali.
Alquilamos unas bicis y nos pegamos una buena paliza con Martina y Sergio.
Una de las cascadas cercanas a Vashist.
María por todas partes...
4/11/2011 - shalimar
Seguís muy equivocados... No se trata de encontrar un lugar extraordinario vacío de gente, sino vacío de turistas.
Existen a montones, incluso en India, en Manali no claro, a rebosar de hoteles y restaurantes para mochileros, y en Singapur tampoco claro, un país occidental en oriente, comodísmo y donde paran todos los que dan vueltas al mundo turísticas.
No hace falta ser un viajero aguerrido para darse cuenta que estos lugares no son para encontrar autenticidad, sino para descansar o cotillear con otros guiris, por eso me sorprende que después de años de viaje sigáis de este palo.
Ya os dije hace tiempo, Pakistan, Yemen, Sudan, Iran, Afghanistan, etc, allí cada dia encontrareis lugares de los que creeis que no existen, extraordinarios y reales, eso si, no os harán un pizza en una terracita, esto es viajar de verdad, sin red, y ahí está la gracia de todo.
En cualquier caso buena suerte, en realidad no espero que me comprendáis hasta que no deis el salto a otro tipo de viaje, que sin duda tarde o temprano llegará cando os canseis de acabar siempre en el mismo tipo de ghetos para mochileros pijos, porque por aquí hemos pasado todos los que viajamos largo tiempo, unos nos salimos en seguida del camino establecido y otros lo hacen más tarde.
Saludos.
4/11/2011 - Xavier y Carme - lavueltaalmundo.net
No, el que sigue equivocado eres tu.
Porque sigues encerrado en la jaula de ego que te has construido, quizás porque a pesar de que dices que has viajado a muchos lugares super alternativos de la muerte, no has aprendido nada.
Parece que quieras demostrar algo a no se sabe quien, producto quizás de un trauma que todavía no has podido superar producido por lo intrascendente de tu existencia, agravado por el hecho de que nadie te debe prestar atención y por eso tienes la imperiosa necesidad de entrar a páginas web donde nadie te conoce y bajo el anonimato que tu poca personalidad necesita, soltar parrafadas y curar así el intenso dáño que produce el haber visitado muchos lugares y seguir vacío por dentro.
Aguerrido viajero... tus palabras muestran hasta qué punto es contradictorio todo tu discurso. Te amparas en tu sabiduría viajera... pero al final eres como aquel inmaduro que tras un montón de años en la universidad, lo ha suspendido todo por que ha juzgado el mundo pensando que poseía la verdad absoluta.
Te deseamos de verdad que encuentres tu camino.
Escritores, viajeros, expertos en marketing online y fundadores de la ONG BPM, somos los autores de esta web. Nos han definido de muchas maneras, pero la que más nos ha gustado fue cuando...
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